A los pocos días de que corriera la noticia de la traumática muerte de Elliott, la pared exterior del estudio Solutions Audio (4334 Sunset Boulevard, Los Ángeles), que otrora sirviera de fondo a la portada de «Figure 8», se llenó de fotos, ramos de flores y las preceptivas velas en homenaje al héroe caído. Los fans se apresuraron a escribir frases de sus canciones y a depositar botellas de alcohol vacías…, como las que tantas veces habían acompañado las madrugadas del artista desaparecido.
El dueño de Solutions decidió respetar «monumento conmemorativo», no como el que fuera frontman de Pink Floyd, Roger Waters quien, intentando promocionar su inminente ‘The Wall Live Tour en 2010, encargó a unos graffiteros que pintaran sobre célebres murales la frase «Cada arma que se hace, cada buque de guerra que se lanza, cada cohete encendido, significa en el sentido final un hurto de los que tienen hambre y no se alimentan, los que tienen frío y no se arropan”, de Eisenhower .
Ante el revuelo provocado entre los fans, Waters no tardó en pedir disculpas («No quería faltar el respeto a los fans de Elliot Smith y he pedido a mi equipo que retiren la obra inmediatamente (…) Quiero hacer público que no teníamos ninguna intención de ofender o cubrir algo tan bonito»). El muro fue restaurado en 2011 y sigue siendo visitado por miles de fans al año.![]()
Las reacciones a la muerte de Elliott no se hicieron esperar, su amigo Mark Flannigan, dueño de uno de los locales de Hollywood en los que Smith solía actuar dijo: «No creo que Elliott se suicidara. Cualquiera pudo haberlo matado, se juntaba con gente muy chunga del mundo de las drogas…». El director del documental sobre Smith Strange Parallel, Steve Hanft, afirmó: «Estaba completamente limpio. Su muerte no tuvo que ver con las drogas, no sé qué paso pero él no era un estúpido yonki».
Las teorías conspiratorias sobre su muerte se extendieron por los foros de internet como la pólvora. Especialmente cuando la autopsia reveló que no había restos de alcohol ni de drogas en el cuerpo del músico, si bien si mostraba haber consumido antidepresivos y ansiolíticos. El informe final policial rezó: «Sus antecedentes depresivos son compatibles con la teoría del suicidio, y la localización y dirección de las heridas cuadran con el auto-apuñalamiento, sin embargo, hay aspectos que son atípicos del suicidio y permiten pensar en el homicidio: Smith muestra dos heridas de cuchillo, ambas atravesaron su pecho y una perforó su corazón. Eso es lógico, una fue tentativa y con la segunda acertó…, sin embargo sorprende la no existencia de ”heridas de vacilación’’- los cortes tentativos que en lógica se produciría alguien que se quitara la vida de esta manera- y la presencia de cortes en ambas manos y bajo su brazo derecho, que parecen heridas de defensa».
Aunque su novia, Jennifer Chiba declaró haber encontrado una nota que decía “Lo siento mucho – Amor, Elliott. Dios me perdone” escrita en un post-it, el informe policial concluye diciendo que «la muerte parece un suicidio pero el asesinato no puede descartarse». Chiba declinó conceder cualquier tipo de entrevista sobre la muerte de Elliott salvo un comunicado a la MTV en el que decía: «No tengo dudas sobre lo que pasó. No
tengo nada que esconder. Si soy sospechosa de algo, me habrían detenido. Yo, su hermana y sus padres sabemos lo que ocurrió. Estoy tranquila». Sin embargo, cinco días después, Conrad Rippy, el abogado de la familia Smith negó las palabras de Chiba: «tras conocer el informe policial, ni la familia de Elliott ni nadie más puede decir que sabe la verdad». El caso ha quedado en suspenso desde entonces.
Los conciertos de homenaje se sucedieron en varias ciudades de Estados Unidos e Inglaterra y varios artistas le han dedicado, desde su muerte, canciones-tributo: Rilo Kiley («Ripchord«), Blazing Scapelands («Elliott, you’re alive!«), Mary Lorson («Lonely Boy» ), o la fantástica «Late» de Ben Folds. Otros, como Beck, incluyeron canciones de Elliott en su repertorio a modo de homenaje («Clementine«, «Alameda«, «Ballad Of Big Nothing«). También se editaron varios discos de homenaje.
No obstante, nada pudo llenar el vacío que la desaparición de Elliott dejó entre sus fans. Necesitábamos su música, sus letras, su voz… Por eso fue tan bien recibida, el 8 de mayo de 2007, la publicación de «New Moon«. Un doble álbum con 24 canciones que Elliott grabó entre 1994 y 1997, durante el periodo en el que colaboró con la discográfica independiente Kill Rock Stars ya antes de fichar por la multinacional Dreamworks. Se trata de una recopilación de temas inéditos, demos, tomas alternativas y algunas canciones a medio terminar.
Es un disco fabuloso y, a pesar de no dejar de ser un álbum de rarezas, su nivel de calidad es estremecedor. De hecho debutó alcanzando la posición 24 de las listas americanas, vendiendo 24.000 copias en su primera semana. Compuesto es su totalidad por canciones del periodo en el que Elliott grabó «Elliott Smith» y «Either/Or», se trata del segundo trabajo póstumo de su autor y arranca con «Angel In The Snow«
, un fabuloso descarte del segundo disco de Smith, «Elliott Smith», que sorprende por su calidad y nos hace preguntarnos qué le hizo no incluirla en el disco. «Talking to Mary«, «High Times«,»Riot Coming«, «Georgia, Georgia«, «Whatever (Folk Song in C)» y «Big Decision» son otros inéditos de las sesiones de «Elliott Smith» y, aunque son buenas canciones, no mejoran a ninguna de las que finalmente conformaron el disco de 1995.
El otro gran bloque de grabaciones que aparecen en «New Moon» es el correspondiente a las sesiones para la grabación de «Either/Or», el enorme álbum que Smith editó en 1997. Es difícil tocar algo en un disco tan absolutamente perfecto como «Either/Or», y sólo asumiendo la extraordinaria calidad del mismo se entiende que canciones como «New Monkey«, la excelente «Looking Over My Shoulder«, «Going Nowhere«, «Placeholder«, «New Disaster«, «Seen How Things Are Hard«, «Fear City«, «Either/Or«, «Almost Over«, o «First Timer«, quedasen fuera…., aunque, en este punto, declaro mi debilidad por «Go By» y «All Cleaned Out«, habría que haberles hecho sitio. Especialmente curiosa es la aparición de una hermosa canción titulada «Pretty Mary K«, que, a pesar de titularse igual que uno de los cortes contenidos en «Figure 8», no tiene nada que ver.
El disco también contiene una estupenda versión del «Thirteen» de Big Star y una gloriosa versión preliminar en formato acústico de su celebérrima «Miss Misery«, lo más parecido que Elliott tuvo a un hit en toda su carrera. Incluso queda tiempo para que Smith recuerde a su antiguo grupo Heatmiser con «See You Later» (en una versión mucho más folkie que la original) y, con el mejor corte del disco, la extraordinaria «Half Right«, que si ya era un temazo en su versión original, en esta versión acústica resulta simplemente monumental.
A pesar de ser un disco de rarezas, el disco presenta una sorprendente coherencia interna y, no hubiera desentonado si hubiera sido editado entre «Elliott Smith» y «Either/Or». En una especie de suerte de Cid Campeador musical, Elliott Smith vuelve a editar otro estupendo -y van dos- álbum póstumo.
Pero en el showbiz, un músico no está oficialmente muerto hasta que se edita el consabido recopilatorio, y eso es lo que ocurrió en noviembre de 2010, siete años después de la muerte de Elliott. «An Introduction to… Elliott Smith« que, así se tituló, es una buena colección de canciones que lo sería mucho más de no haber sido tan escueta en la inclusión de temas correspondientes a la etapa Dreamworks de Smith. Desgraciadamente esto no se debió a motivos de celección artísticos sino a tema de derechos de edición. Así, la recopilación sólo incluye «Waltz#2» de «XO» y «Happiness» de «Figure 8», haciendo que temas absolutamente sobresalientes como «Independence Day«, «Bled White«, «Bottle Up and Explode!«, «I Didn’t Understand» , «Son of Sam«, «Everything Means Nothing to Me«, «Stupidity Tries» o «Easy Way Out«, por citar algunos, quedasen fuera.
Por ello, el recopilatorio no es un buen reflejo de la carrera de Elliott y sí lo es del paso de Smith por Kill Rock Stars/Domino Records. El disco incluye «Last Call» del primer disco de Elliot «Roman Candle», del que yo echo de menos «No Name#1» y «No Name#2«; del álbum «Elliott Smith» de 1995 incluye las fantásticas “The Biggest Lie“ y “Needle in The Hay”, pero deja fuera joyas como “Clementine“, “St. Ides Heaven“ o “The White Lady Loves You More“. «Either/Or» es sin duda el disco mejor representado con cinco temas: “Ballad Of Big Nothing”, “Pictures Of Me“, “Alameda“, “Between The Bars“, “Angeles”, todas extraordinarias…, pero, ¡¡¡por todos los demonios!!!, ¿cómo se puede dejar fuera “Say Yes“? «XO», su primer y maravilloso disco en la multinacional «Dreamworks» es maltratado con la sola inclusión de «Waltz#2«, como también le ocurre al no menos fantástico álbum «Figure 8», del que sólo se incluye «Happiness«. Los dos discos póstumos de Elliott también están representados. De «From A Basement On A Hill» se incluyen las enormes “Twilight” y “Pretty (Ugly Before)” y se excluyen maravillas como “Let’s Get Lost“, “A Fond Farewell”, “King’s Crossing”, “Shooting Star“ o “Memory Lane”. Por último añaden dos temas de su álbum de rarezas «New Moon»: «Angel In The Snow» y la versión acústica de «Miss Misery, que hace que el recopilatorio tampoco incluya tampoco la versión original de la canción, el mayor éxito de su autor.
Por todo esto, «An Introduction to… Elliott Smith« fracasa en su intención de resumir la carrera de Elliott. Puede servir, como dice su título, de introducción a su música, pero sus discos, si exceptuamos los dos primeros y quizás el oscuro (y fabuloso) «From A Basement On A Hill» son tan accesibles -o más- que este recopilatorio. No es difícil hacer un buen recopilatorio de Elliott Smith, entre otras cosas, porque toda su producción es sobresaliente, así que me atreveré a hacer mi selección. 30 canciones, un perfecto doble CD:
CD1
«No Name#2«, “The Biggest Lie“, “Needle in The Hay”, “Clementine“, “St. Ides Heaven“, “The White Lady Loves You More“, “Ballad Of Big Nothing”, “Pictures Of Me“, “Alameda“, “Between The Bars“, “Angeles”, “Say Yes“, «Miss Missery«, «Waltz#2«, «Independence Day«
CD 2
«Bled White«, «Bottle Up and Explode!«, «I Didn’t Understand» , «Son of Sam«, «Happiness«, «Everything Means Nothing to Me«, «Stupidity Tries«, «Easy Way Out«, “Twilight”, “Pretty (Ugly Before)”, “Let’s Get Lost“, “A Fond Farewell”, “Shooting Star“, “Memory Lane” y “King’s Crossing”
Elliott Smith es uno de los mejores creadores de canciones de la historia de la música, no me tiembla la voz al decirlo. Probablemente, de haber desarrollado su carrera en los años 70, hoy sería un mito. El Chico Triste ha sido capaz de tenerme horas con la mirada perdida y el alma encogida tarareando sus canciones, intentando disfrutar cada nota, sentir cada verso de sus prodigiosa poesía. «Depresiva» no es la palabra que yo usaría para describir mi música, pero sí hay algo de tristeza en ella. Tiene que haberla para que la felicidad en ella realmente importe.» Nadie mejor que él mismo podría definirlo. Es cierto que su música puede ser triste, pero lo que es indudable es que es bella…, y me es difícil no sentir felicidad con tanta belleza delante.

Te echaremos de menos, Elliott
TEXTO: Guillermo Mittelbrunn Beltrán. 23 de junio de 2013

Brion como productor. Jon y Elliott eran ya muy amigos y compartían gustos musicales, por lo que todo hacía presagiar un trabajo artísticamente provechoso. Smith estaba decidido a grabar su obra maestra: quería hacer su «White Album», compondría un disco doble exento de artificios y basado en la espontaneidad y la emotividad de la melodía. Sin embargo, Elliott estaba cada vez más enganchado a las drogas y el alcohol y Brion se vio en la obligación de recriminarle lo que estaba haciendo con su vida generando importantes discusiones entre ambos. Dichas discusiones fueron en aumento hasta que un día y de repente, su amistad se rompió en mil pedazos.
crack al día», así como que era frecuente oírle hablar de lo fácil que sería suicidarse provocándose una sobredosis. Poco después, el batería de los Flaming Lips, Steven Drozd y Sam Coomes se sumaron al staff de músicos para contribuir en algunas canciones. El disco avanzaba, pero Elliott estaba cada vez peor,
s Cuomo) y enseguida se fueron a vivir juntos. Pero Smith seguía en caída libre hasta que en noviembre de 2002 Elliott y Jennifer fueron arrestados y supuestamente golpeados por la policía de Los Ángeles. Al parecer el cantante recriminó a un grupo de policías que estuvieran molestando a un grupo de personas que, como él, salían de un concierto de Beck. Los policías confundieron a Smith con un sintecho y lo llevaron al calabozo. Elliott pasó la noche en la cárcel y algo cambió en su cerebro.
Mientras terminaba su disco para Dreamworks, Smith decidió editar, a través del sello independiente Suicide Sqeeze Records, una edición limitada en single de vinilo de 7″ de una canción que llevaba tocando en directo desde tiempo atrás. Esa canción es la nunca suficientemente ponderada «

«From a Basement on the Hill«, fue editado en octubre de 2004, un año después de la muerte de Elliott. Rob Schnapf, productor de sus anteriores trabajos y la música y ex-novia de Smith, Joanna Bolme fueron solicitados por la familia de Elliott para que terminaran el álbum sobre el que estaba trabajando desde mediados de 2001 hasta en el momento de su muerte en otoño de 2003.
Over
Por si fuera poco con las dos primeras joyas, y aunque Elliott nunca la compuso para estar incluida en este disco, «
visto que decidiste abandonarme y ahora, ahí estas, frío y cómodo…, es más fácil que intentar ser un ser humano, o estar siempre drogado, o suicidarte, que es lo único que has intentado. Eta no es mi vida, es una cariñosa despedida a un amigo que no consigue hacer las cosas bien». Sin aliento.
vientos, porque me dijiste que ibas en serio y llegaste hasta el final, y me hiciste llorar… Estrella Fugaz. Eres fría y distante pero eres digna de ver, todos suspiran por ti pero nadie puede tenerte porque no te arrepientes de seguir engañando. Ahora vuelvo a un lugar en donde lidiar con toda la mierda que me hiciste tragar, no será fácil, tu amor es triste, Estrella Fugaz»). Otra canción monumental.
busca de una estética mucho más convencional… Y, en cierto modo, es lo mismo que le ocurre al disco, sin duda el más accesible de toda su carrera. Claramente enmarcable en lo mejor del power-pop, «Figure 8» pierde parte de de la melancolía y oscuridad que caracterizaban sus obras anteriores a cambio de ofrecernos un «caleidoscopio de sonidos e instrumentos deliciosamente inteligente» tal y como dijo NME.
El disco arranca con la prodigiosa «
Trader
«
que fue editado como single y que cuenta con Jon Brion a los coros. Otra maravilla…, y van 12.
versiones de «
referencias de drogas en sus canciones, fueron casi siempre metafóricas. No se volvieron literales hasta mucho tiempo después”, el uso de las drogas por parte de Smith era esporádico pero todo cambio a finales de 2000. Empezó a mostrar un comportamiento errático y claramente paranoico. Solía decir a sus allegados que su compañía discográfica, Dreamworks, trataba de robarle su arte y quería destruirle (¿no os recuerda a Brian Wilson?). Apenas comía y subsistía a base de helados. Pasaba días enteros sin dormir que recuperaba durmiendo durante una jornada completa…
Elliott, ya fichado por Dreamworks, se mudó a Los Ángeles donde retomó su relación con su novia Joanna y comenzó a relacionarse con el mundillo musical californiano estableciendo una fuerte amistad con el músico y productor Jon Brion y retomando su amistad con el ex-miembro de Heatmiser, Sam Coomes, ahora en la banda Quasi.
más lujoso que sus predecesores y en el que, su autor, despliega con maestría todo su buen hacer melódico y lírico. La primera diferencia notable es que «XO», a diferencia de los discos anteriores, es un álbum de banda… una banda de un solo miembro que toca todos los instrumentos y que cambia sensiblemente la emotividad de un sonido antes impregnado de melancolía y que ahora explota cientos de ambientes y matices.
Incluso a nivel lírico la pretérita y bella melancolía de antaño se ve acompañada de pinceladas de furia, amor e incluso alegría creando un mix de emociones realmente interesante. Elliott cuenta con mejores medios, pero sigue siendo él. Especialmente ilustrativa al respecto es la crítica de BBC: «los presupuestos baratos ya son historia para él pero la maestría de Smith con la melodía y los textos melancólicos sigue intacta. Es el mejor disco que Smith ha grabado».
estamos ante un discazo. Sensación que se acrecienta, si cabe, tras escuchar la inconmensurable «
mucho a los sonidos de George Harrison en solitario. Soberbia música y magnífica letra: «Aquí está la silueta, el rostro siempre esquivo y el color sangrante oscurecido, muriendo como muere un día. No puedo entender lo que te hizo tan infeliz (…) Si te entra algún sentimiento la próxima vez que me veas hazme un favor y házmelo saber, porque es difícil de contar, es difícil de decir. Oh, bueno, está bien…»
al preguntarle sobre esta canción, («no lo creo, nunca me gustaron, todas esas letras sobre chicas y coches…, ya sabes, demasiado americano para mí…, eso sí, escuche ese disco, el «Pet Sounds» y es muy bueno, muy musical, «God Only Knows es fabulosa…, no sé…, puede ser»), cuando, voluntaria o no, es más que obvia. Lo que está claro es que es una maravilla que sirve de perfecto colofón a un disco espectacular.
, que además de servir de músicos de acompañamiento a Smith, hicieron de teloneros. El setlist alternaba momentos acústicos (
El director de cine Jem Cohen, atraído por su música y letras, rodó 
Editado el 25 de febrero de 1997 de nuevo en el sello Kill Rock Stars, el disco tomó el nombre del libro de Kierkegaard del mismo título: «Either/Or» (traducido al castellano como «O lo uno o lo otro»). A pesar de sus intencionados aires lo-fi, es un disco muy trabajado en cuanto a texturas y ambientes y supuso un duro reto para Smith no sólo como compositor, multinstrumentista y cantante, sino también como productor. El propio autor reconoce haber escrito y grabado más de 30 canciones antes de decidirse por la docena de maravillas que componen este fabuloso álbum.
debería faltar en la discoteca de nadie que sepa apreciar cómo la melaconlía puede convertirse en una melodía maravillosa, especialmente si se acompaña con una letra a la altura («Apura el trago, cariño, quédate despierta toda la noche, las cosas que pudiste hacer, que no harás aunque podrías, el potencial que llegarás a tener pero que nunca verás, las promesas que tan sólo tú harás. Bebe conmigo ahora y olvídate de todo, de la presión de los días. Haz lo que te digo y te haré sentir bien, me llevaré las imágenes pegadas en tu cabeza. Las personas que tú has sido antes ya no están por aquí, nunca más. Presionan y empujan y no cederán a tu voluntad, pero yo las mantendré quietas. Termina de beber todo, cariño, mira a las estrellas. Te besaré otra vez, entre los bares, donde te estoy viendo, con tus manos en el aire esperando a finalmente ser atrapadas. Bebe una vez más y te haré mía. Te mantendré aparte, en lo profundo de mi corazón, separado del resto, donde me gustas más y mantengo las cosas que ya olvidaste.»). Una canción imprescindible, sin más.
ambiente acústico al que se van añadiendo instrumentos. Buena canción aunque, quizás, no al excelso nivel de las anteriores. Nivelazo que volvemos a recuperar con «
parte del mainstream: grabó un
estrellas por un día».
En la primavera de 1995, Elliott firmó con Kill Rock Stars, un pequeño sello independiente con base operativa en Olympia, Washington. Smith recibió la oferta después de la gira de dos semanas que hizo junto a Slim Moon, artista dueño del sello. Moon ofreció a Elliott un contrato por dos discos y le dio absoluta libertad creativa.
entre autos estacionados con mi cabeza llena de estrellas. Hasta arriba de anfetaminas, la luna es una bombilla quebrándose que andará por ahí con alguien pero no volverá de viajar por nadie. Crees que conoces lo que me arruina, que quiero esas cosas que nunca podrías permitir. Me ves sonreír, crees que es el ceño fruncido en un rostro invertido. Porque todos son unos putos expertos y todos tienen respuestas de los problemas que conocen, y todos ellos tienen que decir qué debes hacer y qué no…aunque no tengan ni idea»). A estas alturas del disco, Elliott ya aparece ante nosotros desnudo, compartiendo su amargura y su extraordinaria sensibilidad con una belleza pasmosa.
El grupo se completó con Tony Lash (batería) y Brandt Peterson (bajo). Elliott y Neil se encargarían de las guitarras, las voces y la composición de las canciones. En 1992 ya estan tocando en los locales de Portland y alrededores y, sólo un años después, editan su primer disco «Dead Air» con el sello Frontier Records, que no tuvo ninguna repercusión.


como no podría ser de otra forma dado que nunca estuvo pensado para ser editado sino como demo casera (muchas canciones no tienen ni título). «No podía sacar esas canciones de mi cabeza, ponía la cinta continuamente… esas letras…, había que dejarlas como estaban…, en crudo», recuerda Christopher Cooper de la discográfica Cavity Search Records, la persona que tomó la decisión de editar un disco grabado en un cuatro pistas por un desconocido en el sótano de su casa.
Editado en plena época de la distorsión, un disco acústico casero era una apuesta suicida, «creía que me cortarían la cabeza en cuanto se publicase el álbum, porque en aquel entonces eso era totalmente contrario a lo grunge que era tan popular. […] La cuestión es que el álbum fue muy bien recibido, lo cual fue una absoluta sorpresa, y, desgraciadamente, inmediatamente eclipsó a Heatmiser». El disco fue muy bien acogido en los circuitos underground y, aún hoy en día, muchos de sus fans defienden que es su mejor trabajo basándose en la autenticidad del sonido que Elliott propone.