Los Kinks habían sufrido un cambio en estos últimos tiempos, de su descarada imitación beatle inicial, habían pasado a terrenos más duros con «You really got me»… pero no se quedaron ahí, y Ray comenzó a desarrollar un peculiar sentido de la ironía al escribir así como un mordaz ojo crítico hacia la sociedad que le rodeaba. Los Kinks, musicalmente habían hecho esencialmente R&B y rock, pero los nuevos textos de Ray y las nuevas inquietudes de la banda. les hizo progresar poco a poco hacia un estilo mucho más personal a medio camino entre el boudeville, el rock, el pop y el music-hall…Bienvenidos a la edad dorada de los Kinks… La publicación de tres singles excelentes de forma consecutiva iba a poner las cosas en su sitio.
La edición de «Dedicated follower of fashion»/ «Sittin’ on my sofa» en febrero de 1966, supone un punto de inflexión en la carrera del grupo, era un estilo propio (aunque Herman Hermits hicieran cosas parecidas), original, muy entroncado en la tradición británica. Los Kinks habían encontrado su terreno y, en él, se iban a mover como pez en el agua. Con «Dedicated follower of fashion» (enlace) inaguran el que sería su estilo más carácterístico, con su aire boudeville y su ácida letra, criticando , en este caso, las modas de la época y la absurda costumbre de los jóvenes de seguirlas al pie de la letra. La cara B, «Sittin’ on my sofa» (enlace) nos devuelve a los antiguos y «gamberros» kinks en un buen tema. El single consiguió un nº4 en Inglaterra y en USA paso desapercibida , algo no de extrañar con una temática tan descaradamente británica.
Si con «Dedicated…» habían cambiado con «Sunny afternoon» / «I’m not like everybody else» dan un paso más. «Sunny Afternoon» (enlace) es una canción grandiosa, hipnótica, seguramente influenciada por el «Pet sounds» de los Beach boys (álbum que también influyó mucho en los Beatles). La interpretación es fabulosa tanto instrumental como vocalmente (los coros son geniales y la voz de Ray cumple dentro de sus limitaciones). La letra acompaña perfectamente a un melodía perezosa que invita a la relajación:
«El recaudador de impuestos se ha llevado todo mi dinero, y me dejó en esta mansión, holgazaneando en una tarde soleada.
Y no puedo navegar en mi yate, el se ha llevado todo lo que tengo, todo lo que tengo es esta tarde soleada.
Sálvame, sálvame, sálvame de este aprieto.
Tengo una gran mamá gorda tratando de destrozarme.
Y amo vivir tan placenteramente, vivir esta vida de lujo, holgazaneando en una tarde soleada.
En un verano En un verano En un verano
Mi novia se ha ido con mi coche, y volvió con sus papás, contando historias de embriaguez y crueldad.
Ahora estoy sentado aquí, tomando un sorbo de mi cerveza helada, holgazaneando en una tarde soleada.
Ayúdame, ayúdame, ayúdame a irme navegando,
dame dos buenas razones por las cuales debería quedarme.
Porque amo vivir tan placenteramente, vivir esta vida de lujo, holgazaneando en una tarde soleada,
en un verano en un verano en un verano.»
La cara B, «I’m not like everybody else» es de nuevo un tema más «a la antigua», cantado por Dave que, siendo bastante bueno, queda ensombrecido por la fastuosa cara A. En esta ocasión, el single es nº1 en UK e incluso consigue un nº14 en USA.
Era obvio que Ray le había «cogido el punto» y ahora no era momento de parar, así que en noviembre del 66, lanzan un nuevo single,
«Dead end street» / «Big black smoke«. La canción titular (
enlace) es otro pedazo de tema con un toque boudeville muy kink. Consiguen un nº8 con el single.
El grupo ya era una banda consolidada, pero el mundo de la música había cambiado con la edición del excelso «Pet Sounds» de los Beach Boys y del enorme «Revolver» de los Beatles. Estamos en los albores de la era psicodélica…¿cómo se moveran los Kinks en este nuevo terreno? Los Rolling Stones habían editado su estupendo «Aftermath«, los Who habían comenzado su transformación con «A quick one«, los Beach Boys habían sorprendido al mundo con «Pet sounds» y lo más importante…los Beatles habían editado «Revolver», posoblemente el mejor álbum de música moderna hasta la fecha. El LP estaba comenzando a convertirse en el formato estrella, la psicodelia y la experimentación en estudio impregnaban las melodías de los músicos de medio mundo.
Los Kinks, aunque solían ir por libre, no podían quedarse al margen de esta nueva situación y tendrían que echar toda la carne en el asador en su nuevo «disco grande»…, y lo hicieron…
«Face to face»
Noviembre de 1966
01. Party line
02. Rosy, won’t you please come home
03. Dandy
04. Too much on my mind
05. Session man
06. Rainy day in june
07. House in the country
08. Holiday in Waikiki
09. Most exclusive residence for sale
10. Fancy
11. Little miss queen of darkness
12. You’re looking fine
13. Sunny afternoon
14. I’ll remember
De nuevo producido por Shel Talmy, este disco es el primer «must have» de los Kinks, la evolución de Ray como creador de melodías y escritor de letras queda perfectamente plasmada en este trabajo. Poco o casi nada queda aquí del R&B de los primeros trabajos del grupo. Es una banda nueva, innovadora, pero a la vez arraigada en la tradición musical británica como ningún otro músico del momento.
La animada «
Party Line» (
enlace), da paso a la excelsa «
Rosy won’t you please come home» (
enlace), primer temazo del disco, que se ve engrandecido por un genial clavicordio que da buena muestra del nuevo estilo de los Kinks.
«
Dandy» (
enlace), otro de los clásicos del grupo, es otra de las muestras de Davies y su mordaz ojo crítico que, de nuevo, vuelve a «atacar» al mundillo de la moda. «
Too much on my mind» (
enlace) es una muy bonita canción de pop británico que da paso a la sardónica «
Session man» (
enlace) dedicada a Nicky Hopkins, pianista que colaboró en el disco así como en la mayoría de trabajos de los Stones y de los posteriores trabajos de Lennon en solitario.
La más oscura y ambiental «
Rainy day in june» (
enlace) precede a «
House in the country» (
enlace), otro retrato irónico de la sociedad británica y que está estrechamente relacionado a nivel lírico con el exitoso «Country house» de BLUR del año 1995. La simpática «
Holiday in Waikiki» (
enlace) no lleva a ningún sitio…, todo lo contrario que «
Most exclusive residence for sale» (
enlace) fabulosa e irónica a partes iguales. «
Fancy» (
enlace) introduce de forma muy acertada a Davies en los sonidos hindúes -popularizados en occidente por George Harrison- y la fantástica pieza de bodeville «
Little miss queen of darkness» (
enlace) y «el
You’re looking fine» (
enlace) de Dave sirven de preludio a la maravillosa y antes comentada «Sunny afternoon» que, a su vez, antecede al cierre del álbum, la poppie «
I’ll remember» (
enlace).
«Face to face», si somos objetivos, posiblemente no tenga el nivel del «Revolver» de los Beatles o el «Pet Sounds» de los chicos de Brian Wilson…, ni quizás el del «Aftermath» de los Stones, pero coloca a los Kinks en su sitio. No podrían competir con los Beatles ni en calidad ni en éxito, no podían convertirse en la alternativa «dura» a los de Liverpool porque ese sitio estaba ocupado por Jagger y sus muchachos…Pero podían ser una alternativa a todo, irían al margen de modas (aunque influídos por ellas), con un estilo propio, escribiendo historias fantásticas y creando una legión de aficionados fieles. El LP ocupa un nº8 en Inglaterra y se hunde en las listas yanquis.
Texto: Guillermo Mittelbrunn, 9 de agosto de 2012.