Los rumores de una posible reunificación son cada vez más fundados, hasta que el día 16 de diciembre de 2011 se anuncia oficialmente un nuevo disco de estudio y una gira conmemorativa del 50 Aniversario de la banda. La gira comenzaría en abril de 2012 y Brian Wilson, Mike Love, Alan Jardine, Bruce Johnston y el rescatado David Marks recorrerán el mundo con una gira internacional de 50 fechas.
“Este aniversario es especial para mi porque echo de menos a los chicos y será emocionante hacer un nuevo disco y compartir escenario con ellos otra vez.” . Declaró Brian Wilson. Lo primero que se filtra de la reunión es una nueva y estupenda versión de «Do it again» (enlace) de la que Mike comentó «Nos juntamos en Capitol Records y regrabamos ‘Do It Again.’ Brian y yo escribimos esa canción y llegó al número 1 en Gran Bretaña, Australia y otros lugares hace 44 años. Brian me hizo un cumplido, ‘¿Cómo puede sonar alguien tan bien tantos años después?’ Más tarde, mientras trabajábamos en unas armonías de una nueva canción de Brian, tuve la ocasión de devolverle el cumplido. Fue emocionante estar alrededor del piano otra vez junto a Brian, Alan y Bruce y experimentar de primera mano la brillantez del don de Brian para los arreglos vocales.. Ha sido una gran bendición que hemos podido compartir con el mundo. ¿No estaría bien hacerlo una vez más? ¡Absolutamente!”. Tenemos operación nostalgia en marcha.
El 12 de febrero de 2012, y con motivo de la 54ª entrega de los Premios Grammy, los Beach Boys actúan en la Gala (enlace). La primera actuación de Brian con los Beach Boys en más de 15 años. La actuación (aunque en claro pseudo-playback) es más que ilusionante y empieza a hacer que muchos de los escépticos con la reunión comiencen a albergar esperanzas de que esta reunión traiga algo bueno.
Entretanto la banda ensaya (enlace) los temas para la gira a la vez que trabajan en el estudio los últimos detalles de su nuevo disco de estudio
Dos meses después, el 24 de abril, los Beach Boys comienzan la gira en Tucson (enlace). Los comentarios de público y crítica son unánimente positivos. Brian, quien no olvidemos que aunque está muy recuperado si lo comparamos con unos años atrás no deja de ser un hombre muy enfermo, se muestra ausente durante el Show, si bien sus intervenciones son las más aplaudidas… Dos días después se estrena, en formato digital, el primer single de lo que será el nuevo disco de los Beach Boys: «That’s why god made the radio» (enlace).
La canción, con música de Brian Wilson arranca con un sonido clásico, que recuerda a los primeros años del grupo y con un brillante Brian en la voz principal. La sencilla y ultraclásica melodía puede decepcionar en una primera escucha… hasta que llegamos al estribillo…la explosión de armonías, ese falsetto…Son los Beach Boys. Si no fuera por la horripilante letra, estaríamos hablando de una canción más que notable. Esto tiene buena pinta. ¿Serán capaces estos vejestorios de grabar un buen disco después de haber estado porquerías desde 1985?
El estreno del single genera cierta controversia entre la crítica, pero son muchos los que comienzan a interesarse por el futuro disco, especialmnente cuando Bruce Johnston afirma que las nuevas composiciones de Brian le recuerdan a «Pet Sounds» y que el sonido del disco se acerca a «Sunflower»… Y mientras el grupo sigue girando y realizando apariciones televisivas (enlace)… Hasta que llega el día, el 5 de junio se publica «That’s Why God Made The Radio», el primer disco de estudio con nuevo material de Los Beach Boys en 20 años.
«THAT’S WHY GOD MADE THE RADIO»
1. Think About The Days (B.Wilson-J.Thomas)
2. That’s Why God Made The Radio (B.Wilson-J.Peterik-L.Millas-J.Thomas)
3. Isn’t It Time (B.Wilson-M.Love-J.Peterik-L.Millas-J.Thomas)
4. Spring Vacation (B.Wilson-M.Love-J.Thomas)
5. The Private Life Of Bill And Sue (B.Wilson-J.Thomas)
6. Shelter (B.Wilson-J.Thomas)
7. Daybreak Over The Ocean (M.Love)
8. Beaches In Mind (B.Wilson-M.Love-J.Thomas)
9. Strange World (B.Wilson-J.Thomas)
10. From There To Back Again (B.Wilson-J.Thomas)
11. Pacific Coast Highway (B.Wilson-J.Thomas)
12. Summer’s Gone (B.Wilson-J.Bon Jovi-J.Thomas)
Producido por Brian Wilson
Editado en Junio de 2012
He de reconocer que, desde que se anunció su edición, he tenido sentimientos encontrados respecto a este «That’s why god made the radio». Por un lado, el recuerdo de los lamentables discos editados en los últimos 25 años no hacía presagiar nada bueno; por otro, el regreso de Brian al grupo y el gran nivel de los últimos trabajos en solitario de éste permitía un espacio para la esperanza.
Vamos allá. El disco arranca… bien, muy bien, con «Think About The Days» (enlace) una de la típicas corales «Made in Wilson» al modo de clásicos como «Our Prayer» acompañada, en esta ocasión de una bellísima frase de piano…¿Será posible?, es una pieza preciosa, ¿habrán conseguido hacer un gran disco a sus 69 años de media?, ¿después de tanta basura?, aún es pronto, pero la cosa pinta bien. Turno para el single, «That’s why God made the radio» (enlace), un buen tema con una letra embarazosamente ridícula. Seguimos con un buen nivel. A estas alturas empezamos a pensar que podemos estar ante algo grande. Entonces llega «Isn’t It Time» (enlace), un fantástico e infeccioso tema pop con Brian de nuevo a la voz principal (que alterna con Mike), que sorprende por su frescura y su excelente factura…¡qué va a ser verdad!, ¡qué los viejarras han vuelto por sus fueros!
Pero, por desgracia, las esperanzas se empiezan a desvanecer cuando llegamos a la vulgar «Spring Vacation» (enlace) en la que lo que más destaca es su irónica letra («We’re back together, easy money») y la voz de Al. La canción no es mala pero empieza a recordar a sus pretéritos tiempo pachangueros a partir de los 80. «The Private Life Of Bill And Sue» (enlace) empieza a alimentar los peores presagios. Brian canta esta baratija más propia de «La Sirenita» que de un disco serio. Ay, ay, ay…
«Shelter» (enlace) nos da un poco de aire. No es un tema monumental pero su efectivo es tremendamente efectivo (con falsetto «alla Brian» a cargo del inefable Jeff Fosckett) y con Brian a la voz principal la canción llega a buen puerto. Les perdonamos los deslices anteriores… ¿o no?… El siguiente tema está compuesto por Mike Love…miedito…, como no podía ser de otra forma «Daybreak over the ocean» (enlace) es una cancioncilla inofensiva que también encajaría en la banda sonora de «La Sirenita»… Pffff… Esto empieza a dar pereza… Con «Beaches in Mind» (enlace), llega la confirmación, otro disco para olvidar, las tres primeras canciones habían sido un espejismo. No hay por donde cogerla.
Cuando ya estaba a punto de sacar el CD del reproductor, llegaron unos acordes de piano, Brian, esas potentes percusiones…»It’s a straaaaange world«. Esto está mucho mejor. «Strange World» (enlace) es un muy buen tema, en una línea melódica muy en el estilo de los Who de Quadrophenia y en el que, por primera vez en el disco, empezamos a notar la mano de Brian en la producción. Bueno…, vamos a darle una oportunidad, total, quedan tres canciones…
Y entonces llega la fantásticamente conservada voz de Al…, » From There To Back Again» (enlace), ¡vaya temazo!, la mejor balada de Brian desde 1978…, en torno a mitad la canción las armonías toman el poder, antes de ceder la voz a Brian. Una maravilla. Una auténtica maravilla. Con una sonrisa en la boca, me dispongo a escuchar el resto del disco con la tranquilidad de tener una joya de canción (y tres joyitas menores más) que llevarme al oído cuando quiera. Pero, entonces, sin pausa, sin espacios, llega «Pacific Coast Highway» (enlace). Con Brian al mando vocal, es otra barbaridad de canción, especialmente intensa y con un nivel melódico estratosférico… pero no acaba aquí, de nuevo sin pausas, comienza «Summer’s gone» (enlace), ¡¡el tío Brian nos está regalando una de sus «suites»!!, otra preciosidad en la que Brian reflexiona (como en todas las canciones de esta suite final) acerca de la llegada de la vejez, del crepúsculo de sus vidas, del fin del verano… ¿ Hay mejor forma de terminar el que probablemente será el último disco de lo Chicos de la Playa?
«That’s Why God Made The Radio» no es una obra de arte, no es un discazo pero, por fín en muchos años, es un disco propio de una banda como los Beach Boys. Mucha gente divide la carrera del grupo entre la comunmente elogiada estapa hasta «Pet Sounds» y la denostada época posterior. Particularmente me parece una injusticia que sólo se puede cometer desde el desconocimiento de la obra del grupo. De hecho, hasta 1977, sólo editaron un mal disco, «15 Big Ones«…, pero no es menos cierto que desde entonces fueron de mal en peor. Trabajos como «M.I.U. Album», «L.A. (Light Album)», «Keepin’ the summer alive», «The Beach Boys», «Still Cruisin'», «Summer in paradise» y «Star and Stripes» son discos malos, algunos horribles, y han hecho un daño irreparable a la imagen de la banda entre el común de los mortales. Y es en este sentido por lo que «That’s Why God Made The Radio» cobra valor. Los Beach Boys graban su mejor disco desde 1978 y es el que servirá de epitafio a su carrera.
Es fantástico que la carrera de la banda tenga la excelente suite final del álbum como punto final. Lo merecían. Pero, como era de esperar, teniendo en cuenta los precedentes, la reunión de los míticos Beach Boys no terminó del todo bien. El disco fue un éxito (número 3 en las listas Billboard), así como la recepción de los conciertos, pero las tensiones entre Mike Love y Wilson terminaron con un nuevo alejamiento de posturas. Mike seguiría girando con unos nuevos Beach Boys y Brian volvería a su retiro, aunque su página web enseguida anunció que estaba grabando y produciendo un nuevo trabajo en solitario que contaría con la participación del brillante guitarrista británico Jeff Beck, y sus ex-compañeros de The Beach Boys Al Jardine, David Marks y Blondie Chaplin. Por razones aún no detalladas por ninguna de las partes, el material producido durante esas sesiones decidió desecharse y Wilson siguió trabajando en el estudio hasta que en el invierno de 2014 anunció que el disco estaba terminado. La idea era contar con varias voces colaboradoras y armar un disco de «duets». El título del álbum sería «No Pier Pressure» y se editaría en la primavera de 2015.
1. «This Beautiful Day» (Wilson-Thomas)
2. «Runaway Dancer» (Wilson-Thomas)
3. «What Ever Happened» (Wilson-Thomas)
4. «On The Island» (Wilson-Thomas)
5. «Our Special Love» (Wilson-Thomas)
6. «The Right Time» (Wilson-Thomas)
7. «Guess You Had To Be There» (Wilson-Thomas)
8. «Tell Me Why» (Wilson-Thomas)
9. «Sail Away» (Wilson-Thomas)
10. «One Kind Of Love» (Wilson-Thomas)
11. «Saturday Night» (Wilson-Thomas)
12. «The Last Song» (Wilson-Thomas)
13. «Half Moon Bay» (Wilson-Thomas)
La primera mala noticia, al tener el álbum entre las manos, es comprobar que el disco estaba producido de nuevo por Joe Thomas, uno de los más recalcitrantes representantes del más puro sonido AOR. Amante del demoníaco Autotune y arquitecto de pulcros y fríos sonidos. Thomas ya colaboró con Wilson en la producción y la composición de los temas del último disco de los Beach Boys «Why God Made The Radio» y en algunos de sus trabajos en solitario, como el insípido «Imagination» de 1998.
No obstante, la cosas empiezan muy bien con la breve y preciosista «This Beautiful Day«, una bonita, serena y sobresaliente balada con una melosa melodía que a pesar de sus azucarados arreglos funciona de forma fantástica como arranque del disco. Excelente comienzo que hace que empecemos a albergar unas esperanzas que se tambalean con «Runaway Dancer«, una extraña suerte de electro-pop con dueto con el miembro de Capital Cities Sebu Simonian. No es que sea una mala canción, simplemente descoloca.
La excelente bien conservada voz de su es-compañero de The Beach Boys, Al Jardine, es la protagonista de «Whatever Happened«, una evocadora balada que roza la ñoñería. Resulta agradable, está bien construida pero es tan blandita y autocomplaciente resulta absolutamente inofensiva. Es cierto que Wilson nunca ha sido muy amigo de decibelios y estridencias, pero su música siempre ha tenido un algo que aquí se pierde entre azucarados mantos de armonías autotuneadas. Está muy lejos de ser una mala canción, en cualquier caso. «On The Island«, la siguiente canción, cuenta con la colaboración del dúo de indie folk estadounidense She & Him, y se trata de una agradable canción de aromas hawaianos en la que destaca la acertada interpretación de Zooey Deschanel. Buen tema.
El comienzo y el final de «Our Special Love» nos recuerdan al mejor Wilson, pero enseguida penetra en ambientes de «radio-fórmula madura» bastante prescindible. Una lástima porque esta canción apuntaba maneras. El joven cantante Peter Hollens colabora en el tema. También tiene muy buenos momentos «The Right Time» en la que el ex-Beach Boy Al Jardine vuelve a tomar la voz cantante en las estrofas mientras Brian luce falsetto en los estribillos. Muy agradable, muy blandita también, pero da gusto escucharla.
La joven estrella country Kacey Musgraves es la voz principal en «Guess You Had To Be There«, un pegadizo medio tiempo de country-pop que es de lo mejor del disco pero en la que es difícil reconocer el estilo de Brian Wilson como compositor. Algo más reconocible resulta «Tell Me Why«, pero, de nuevo, lo mismo AOR puro, límpidos arreglos y un sonido demasiado empalagoso… Y cuando ya estamos a punto de rendirnos llega «Sail Away» con dos ex-Beach Boys, Blondie Chaplin y Al Jardine, compartiendo estudio con Brian y, sin ser ninguna joya, nos anima a seguir un poco más, y la espera merece la pena, pues, «One Kind Of Love» es, junto a «This Beautiful Day», lo mejor del disco. Ahora, sí, muy Brian Wilson…, lejos de su mejor material, pero muy reconocible. Muy buena canción y grandes arreglos vocales.
Hay esperanza, pero la soporífera «Saturday Night«, con el joven Nate Ruess al micro, nos devuelve a la radio-fórmula menos edificante. Lo peor del disco, una canción muy floja que no debería estar en el catálogo de semejante genio…, pero entonces llega «The Last Song» con sus hermosos arreglos vocales y su maravillosa melodía que ni siquiera los pomposos arreglos de la parte final de la canción consiguen estropear. Y es que no podemos olvidar que Brian Wilson ha sido uno de los grandes. Sus problemas mentales, el abuso de drogas y las influencias maliciosas de su entorno acabaron por apagar, hace ya mucho, una de las estrellas más brillantes del firmamento musical… Aún así, a veces, como si se escapara por una rendija de su torturado cerebro, su talento nos deja joyitas como «Half Moon Bay«, el maravilloso instrumental que cierra el álbum.
TEXTO: Guillermo Mittelbrunn. 22 de noviembre de 2012. Editado el 25 de abril de 2015